¿Cuáles son las características de adolescentes que están a punto de terminar la secundaria y deben decidir el camino a seguir, cuál es su perspectiva de futuro, qué cambió respecto de generaciones anteriores? Son jóvenes post pandemia, que revalorizaron el tiempo, que tienen un proyecto de futuro más acotado, que son más auténticos, que se conectan mejor con sus deseos, que pueden registrar lo que quieren, lo que sienten y también lo que pueden, que tienen capacidad para adaptarse a los cambios, que piensan en una salida laboral para el aquí y el ahora y que -en muchos casos- mantienen una brecha con sus familias, acostumbradas a un proyecto para toda la vida.
Esas respuestas las brinda a Unidiversidad el equipo del Departamento de Orientación Vocacional y Ocupacional de la UNCUYO. Nadie mejor: acompaña a cientos de chicos y chicas de toda la provincia para que tomen la mejor decisión que puedan respecto de su futuro. Sus respuestas tienen una base teórica, pero sobre todo práctica que se alimenta de miles de voces que cuentan sus sueños, sus habilidades, sus temores, sus dudas, que aceptan su guía para decidir qué quieren hacer o para rever su decisión, si creen que se equivocaron.
Mónica Vicchi y Marisa Marlia coordinan ese equipo que brinda un servicio a toda la comunidad mendocina en forma gratuita y que hace poco cumplió 43 años de labor. Y es sobre esa labor que trazan el perfil de chicos y chicas de este tiempo.
“Son jóvenes de post pandemia y eso ha marcado tanto a los adultos como a ellos. Me parece que esta experiencia bastante traumática hizo revalorizar el tiempo, es decir qué quiero hacer hoy, ahora, no están proyectando tanto como en otras épocas donde creíamos que éramos infinitos y eternos. Entonces estos jóvenes se conectan con el deseo, se conectan con qué quieren hacer, con un plan de acción más acotado, con menos tiempo. Desde ese lugar los veo como más auténticos, como que pueden registrar lo que quieren, lo que sienten y también lo que pueden, porque es bueno no solamente saber qué quiero, sino también qué deseo, qué puedo, cuál es mi situación”, resume Vicchi.
Nuevo perfil, nuevas carreras
Cualquier chico o chica que curse los dos últimos años de la secundaria pueden inscribirse y participar en los talleres grupales tanto presenciales como virtuales de orientación vocacional, que incluyen una entrevista inicial, seis encuentros y una devolución profesional.
El equipo también brinda talleres para quienes ya estudian una carrera y necesitan reforzar técnicas de aprendizaje, o para quienes ya cursan, pero quieren rever su elección, así como para adultos que desean estudian una carrera. Y ahora, piensan incluir talleres para las familias, para acompañarlas, para trabajar en esa brecha generacional que genera dudas e incertidumbres.
Vicchi, psicopedagoga y coordinadora del equipo, y Marlia, técnica en psicología social y co coordinadora, explican que el perfil distintivo de jóvenes de este tiempo también se refleja en sus elecciones de oficios y carreras, que buscan sean cortas y con una salida laboral. En este sentido, se inclinan por las relacionadas con informática, las nuevas tecnologías, todas las ingenierías, las deportivas, la piscología, aunque un grupo sigue eligiendo carreras tradicionales, como medicina, pero en ese caso suelen ser vocaciones que están claras. Otro aspecto distintivo -señalan- es la opción por aprender un oficio, una oferta que creció en los últimos años.
El equipo muestra toda la oferta de carreras y oficios de Mendoza, no solo los de la UNCUYO, lo que incluye a las casas de estudio privadas, la provincia y las comunas, que entre todas suman un amplio abanico de opciones. Esto -resaltan- porque el objetivo central es acompañar para que tomen la mejor decisión posible.
Orientación post pandemia
La coordinadora del servicio, Mónica Vicchi contestó las preguntas de Unidiversidad.
Ustedes realizan talleres con cientos de jóvenes. ¿Qué características distintivas ven respecto de generaciones anteriores?
La característica que observamos es la inmediatez, el joven busca algo concreto, con una salida laboral rápida. Están muy entrenados en los cambios, cosa que quizás antes no, pueden elegir un trabajo y dejarlo porque no les gusta o porque no cumple sus expectativas, lo cual antes era raro que alguien que ingresaba a una institución o a una empresa y se fuera de ese trabajo. Creo que antes no conectaban tanto con el deseo, sino con la seguridad laboral, hoy no, pienso que el joven es más auténtico y se conecta con esto que quiere, que le brinde no solamente posibilidades profesionales, sino también de crecimiento personal, monetario, que le sirva, que puedan avanzar. Desde ese lugar eligen y tienen elecciones más certeras, más concretas, no tanto en proyección es decir el día de mañana voy a ser… Si bien muchos jóvenes siguen eligiendo carreras tradicionales universitarias y más largas, son los que ya tienen una vocación muy determinada como medicina, economía o hasta las ingenierías, pero los que no están tan orientados, los que no tienen una vocación tan determinada buscan este espectro de carreras y de ocupaciones que sean más móviles, que se pueda trabajar desde la casa o en otro lugar del país, esas características sí las vamos observando, como que piden nuevas carreras, piden nuevas elecciones vocacionales.
Usted dijo que son más auténticos. ¿Por qué?
Yo creo que sí, que esto tiene que ver con que son jóvenes de post pandemia y eso ha marcado tanto a los adultos como a ellos. Me parece que esta experiencia bastante traumática hizo revalorizar el tiempo, es decir qué quiero hacer hoy, ahora, no están proyectando tanto como en otras épocas donde creíamos que éramos infinitos y eternos. Entonces se conectan con el deseo, con un plan de acción más acotado, con menos tiempo. Y desde ese lugar yo los veo como más auténticos, como que pueden registrar lo que quieren, lo que sienten y también lo que pueden, porque es bueno, no solamente saber qué quiero sino también qué deseo, qué puedo, cuál es mi situación, porque no todos los jóvenes de Mendoza ni del país tienen la misma situación socioeconómica. Hay chicos que eligen oficios porque se pueden capacitar en poco tiempo y seguramente tienen una rápida salida laboral y, a veces, después pueden llegar a continuar otro estudio, una licenciatura, una formación, una actualización de eso que eligieron. Antes esto no existía en la oferta educativa y ya hace dos años que desde la universidad se ofrece información de oficios, porque hay una demanda, entonces eso es interesante, eso es un cambio significativo. Otro aspecto es que se desmitificó el tema de tener el título universitario de cinco, seis, ocho años, y por eso vuelvo a lo mismo, se revaloriza el tiempo, se revaloriza la ocupación en el aquí y el ahora, entonces ya esto de tener el título, de “mi hijo el doctor” como se decía antes está muy relativizado. Hoy sabemos que en todas las carreras cuesta la inserción laboral, cuesta tener un trabajo estable, un trabajo bien remunerado, entonces todos esos datos de la realidad han hecho que también los jóvenes los observen, los vivan a veces con sus padres, con gente cercana, entonces ya no está tanto esto de la idealización del título universitario, si lo eligen seguramente es porque tienen una vocación bien determinada y priorizan transitar todos esos años para lograr lo que quieren, pero hay muchos que no están tan orientados, que no saben tanto, entonces buscan esto nuevo.
La independencia y la autonomía también son rasgos de los jóvenes de hoy, que no dependen tanto de tener esto del trabajo estable, de la empresa para toda la vida. Creo que no tienen tanta estructura mental de cómo tienen que ser las cosas, sino que pueden ir armando su propio proyecto de vida, que no está establecido ni tiene que ser ingresar a un lugar, trabajar tantos años, la familia etc. Esto ha cambiado muchísimo, la línea del tiempo de ellos es totalmente diferente.
La brecha familiar
¿Las familias comprenden esa nueva mirada, ese proyecto más acotado?
En general, hay mucha ansiedad y angustia, porque la familia que los acompaña es de otra generación, han transitado otros valores, otros matices y esto les implica una incertidumbre. Tenían otras estructuras, había una proyección a largo plazo y hoy sabemos que las carreras van cambiando, que las demandas laborales de las empresas del mundo van cambiando, entonces quizás ya no es garantía ser licenciado en algo o doctor en tal cosa, sino que tiene que ver con las habilidades que cada uno vaya entrenando. Las habilidades blandas, socioemocionales son muy importantes en cualquier trabajo y esto es algo de lo que antes no se hablaba.
Antes era solo saber la teoría…
Claro, solamente el contenido, la currícula y si sabías eso, tenías garantizado un buen trabajo. Hoy, las empresas, sobre todo multinacionales, buscan primero la habilidad, el currículum es lo último que miran. Ven la persona, cómo se desenvuelve, si tiene capacidad de trabajar en grupos, si sabe resolver problemas, si tiene habilidades para hablar con los demás, en la comunicación. Todo esto es algo que los jóvenes van olfateando, van dándose cuenta que es así.
Frente a esta familia, qué sienten chicos y chicas, qué les expresan
Hay una brecha comunicacional ahí, por eso nosotros queremos intervenir y estamos preparando talleres con la familia. Por ahí pueden sentir frustración, porque no pueden hacer una conexión o se sienten solos, porque la elección no es mirada como algo aprobado, o como que no entienden qué van a hacer, qué es marketing digital, qué es eso, a qué te vas a dedicar, cómo vas a vivir.
La UNCUYO está inmersa en un proceso de análisis y modificación de planes de estudio ¿Cómo ven ustedes la oferta educativa, responde a las necesidades?
Yo creo que la universidad ha hecho una buena autocrítica, saludable, que está justamente registrando que hay que actualizarse. No creo que la oferta educativa esté mal, sino que hay que aggiornarla, digitalizarla, hay que modernizarla con los recursos tecnológicos que se utilizan o que no se utilizan, pero hay que incorporarlos. Lo bueno y lo saludable es que la universidad está haciendo esta autocrítica, actualizando los contenidos y sobre todo analizando cómo dar los contenidos que es lo más importante, porque hoy la información está al alcance de cualquiera, cualquier chico puede saber de cualquier materia, entonces el tema es la mediación de ese contenido, es lo más importante para que tenga sentido, es avanzar sobre esa base, es cómo llego a esos estudiantes, cómo los motivo para poder sostenerlo en un tramo universitario.