Lamentablemente, no todos los productos antivirus proporcionan una solución utilizable y confiable que brinde un nivel de protección adecuado contra malware. La efectividad de estas soluciones depende de factores como su fiabilidad, facilidad de uso y capacidad para detectar amenazas cada vez más sofisticadas. Sin embargo, la seguridad digital también requiere una comprensión profunda de los riesgos y prácticas adecuadas, como mantener actualizado el software y evitar comportamientos de riesgo al usar dispositivos.
Incluso la instalación de los antivirus en nuestros dispositivos sigue siendo tema de debate, ya que suele generar largas discusiones sobre el rendimiento del equipo, la usabilidad de las soluciones de seguridad, la privacidad del usuario y otra cantidad de tópicos que muchas veces extienden la conversación.
Hay quienes dicen que al tener un antivirus instalado se extiende la posibilidad de un atacante para vulnerar un sistema, porque podrían aprovechar las vulnerabilidades de estas herramientas. Y hasta cierto punto hay veracidad en ello: instalar una nueva aplicación en el sistema extiende la superficie de ataque. Pero, al instalar esta herramienta son muchas más las amenazas que ayuda a prevenir que las que podría ocasionar.
Son varias las razones por las cuales instalar esta herramienta, algunas de ellas son:
1. Diversidad de amenazas
Los antivirus han evolucionado y pasaron de detectar solamente virus informáticos hasta convertirse en soluciones de seguridad completas, que proveen muchas otras funcionalidades como firewall, filtros antispam y antiphishing o escaneo de memoria, entre otras, que dan una protección integral al sistema y te permiten navegar seguro en el contexto actual de amenazas.
2. Variedad en la forma de propagarse
Muchas veces se necesita la interacción del usuario para que ejecute un archivo, abra un documento o descargue algo en su dispositivo móvil para que comience la infección.
3. Tecnologías vulnerables dan cabida a diferentes amenazas
Las amenazas informáticas no solamente aprovechan fallos y vulnerabilidades en versiones particulares de un sistema operativo, también lo hacen en aplicaciones, lo cual abre la posibilidad de una infección independientemente de la versión del sistema operativo que se utilice. Además, a lo anterior se suma la variedad de lenguajes utilizados por los atacantes, que extienden sus posibilidades de afectar sistemas: desde lenguajes compilados hasta scripting son utilizados para atentar contra diversas plataformas.
5. Plataformas afectadas
Sin lugar a duda, la mayoría de los códigos maliciosos están enfocados en afectar sistemas operativos Windows, pero cada vez se vuelve más común encontrar amenazas para otros sistemas como Mac OS X o Linux, a pesar de que muchos siguen creyendo en su invulnerabilidad. Incluso hay malware para sistemas móviles como Android o iOS, así que es hora de comprender que no hay plataformas libres de riesgos.
6. Concentración de amenazas
Es una realidad que una solución de seguridad no va a parar todos los ataques de los que pueda ser víctima un usuario, pero sí va a servir para prevenir la infección en la gran mayoría de los casos. Considerando el crecimiento en la cantidad de códigos maliciosos que circulan, es importante no dejar la protección al azar.
7. Uso del dispositivo
El uso que se le da al dispositivo es fundamental para prevenir una infección. Cuando es de uso compartido se elevan las posibilidades de ser víctima de un cibercriminal.
Criterios para obtener la mejor protección antivirus
- Confiabilidad
Hasta la solución antivirus más completa puede resultar absolutamente inútil si entra en conflicto con otro programa de software que se está ejecutando en tu computadora. Si estos conflictos causan un mal funcionamiento o una suspensión temporal de los procesos de protección antivirus, puedes quedar expuesto a riesgos.
- Capacidad de uso
Si el uso diario de una solución antivirus requiere habilidades especiales, puede ser poco práctica para numerosos usuarios. Cualquier producto antivirus que sea difícil de usar, que plantee preguntas complejas al usuario o que le exija tomar decisiones difíciles puede llegar a aumentar las posibilidades de que se produzcan "errores de operador". En algunos casos, si el software antivirus es demasiado difícil de ejecutar, el usuario puede sencillamente inhabilitarlo.
- Protección integral
Una solución antivirus debe brindar protección continua para todos los dominios informáticos, todos los tipos de archivos y todos los elementos de red que podrían estar expuestos al ataque de un virus informático u otro tipo de malware. El programa debe ser capaz de detectar código malicioso y proteger todos los canales o puntos de entrada a la computadora, como correo electrónico, Internet, FTP y más.
- Calidad de la protección
Ya necesites una solución de seguridad antivirus para Windows o para Apple, los antivirus deben ser capaces de operar en un entorno agresivo que cambia constantemente, con nuevos virus informáticos, gusanos y troyanos que pueden ser mucho más complejos que el malware conocido anterior y pueden incluir nuevas maneras de sortear las acciones de los programas antivirus. En parte, la calidad de la protección depende de los siguientes elementos:
- Eficacia de los procesos de detección de malware
- Frecuencia y regularidad de las actualizaciones
- Capacidad de eliminar infecciones de la computadora
- Eficacia en la entrega de protección a la computadora, sin afectar de manera importante su rendimiento
Es cierto que no basta con tener una solución de seguridad. Garantizar que vamos a estar seguros va más allá de solamente contar con un antivirus instalado: conocer las amenazas y cómo se propagan, además de hacer un uso adecuado de la tecnología, principalmente manteniendo actualizados sistemas operativo y aplicaciones, ayudan a tener una protección real contra todo tipo de amenazas.