Según la “Guía de recomendaciones de compras seguras” de la Secretaría de Innovación Tecnológica del Sector Público de la Nación, existen tres niveles de seguridad:
a. La seguridad del dispositivo – computadora, tablet o celular - desde donde se va a realizar la compra.
b. La seguridad que ofrece el sitio web donde se va a realizar la transacción.
c. La reputación de la empresa que se encuentra detrás de la tienda en línea.
En relación con esta información, agregamos la proporcionada por la dirección de Defensa del Consumidor; que son una serie de consejos para prevenir:
1. Registrar las ofertas: capturar las ofertas atractivas mediante una impresión de pantalla o una foto con tu celular. Esto te proporcionará una prueba sólida en caso de discrepancias con lo acordado.
2. Seleccionar comercios con buena reputación: optar por comercios con altas calificaciones y reputaciones positivas. Examinar la opinión de otros usuarios en las publicaciones y evitar cualquier intento de contacto fuera de la plataforma de compras para coordinar pagos y envíos.
3. Verificar la seguridad del sitio: asegurarte de que el sitio web sea seguro para compras en línea. Un candado en la parte superior del navegador es una señal de seguridad. Conocer la razón social, el domicilio para hacer reclamos si hay algo que falla o no funciona. Hay que tratar de comprar en sitios seguros donde podamos identificar quién está del otro lado.
4. Evaluar las opciones de envío: preguntar al vendedor acerca del sistema de envío utilizado y dar preferencia a aquellos que ofrezcan herramientas de seguimiento en línea. La capacidad de rastrear tu pedido brinda tranquilidad.
5. Verificar el stock: no avanzar con una compra si el producto está agotado. Antes de realizar una adquisición, asegurarte de que haya stock disponible.
6. Analizar las opciones de pago: exigir un ticket o factura, que son documentos cruciales para demostrar la titularidad de la compra y para futuros reclamos de garantía. Muchas veces hay promociones y hay que leer atentamente sus alcances. Muchas veces combinan pagos con tarjetas de crédito. Hay que ver si las cuotas tienen, o no tienen, interés. Ver si no hay gastos extras más allá del precio ofertado. Ver cuáles son los plazos de envíos.
7. Leer los términos y condiciones de los descuentos: asegurarte de entender los términos y condiciones de los descuentos ofrecidos en las tarjetas de crédito, especialmente si existen límites que puedan afectar tu ahorro.
8. Supervisar los tiempos de entrega: hacer un seguimiento de tu pedido con el código proporcionado por la empresa. En caso de cualquier problema, comunicarte directamente con la empresa para buscar soluciones. Si la empresa no cumple con la entrega, tendrás derecho a presentar una denuncia.
9. Derecho de arrepentimiento: los consumidores tienen el derecho de cancelar cualquier compra realizada en línea durante un período de 10 días a partir de la fecha de recepción del producto o servicio. Esto se aplica a compras por medios postales y no se requiere justificación. Asegurate de conservar el producto en perfecto estado para su devolución, aunque los costos de envío por la devolución deben ser cubiertos por el vendedor. Se puede hacer a través del llamado 'botón de arrepentimiento'. Todas las páginas web tienen que tener ese botón. Así, si compramos un producto y lo vemos con una oferta que nos tentó más o que el producto no era lo que esperábamos podemos deshacer la compra. Podemos hacerlo sin explicar por qué lo hacemos y sin ningún cargo a nuestra costa.
Una oferta publicada es un compromiso del proveedor con el consumidor. Una vez que hayas abonado un producto, el comercio no puede argumentar falta de stock o cancelar la compra. En caso de incumplimiento en la entrega, los consumidores pueden exigir la entrega de un producto similar (pero nunca inferior) o anular la transacción sin costo adicional.